Comportamiento de los coloides
Purificación de coloides.
Para poder estudiar un coloide es necesario eliminar interferencias. El
papel filtro no sirve si el tamaño de partícula es menor
a 10-6m. Por otra parte, muchas veces nos interesa eliminar
partículas más pequeñas que las coloidales, p. ej.,
iones en exceso que a veces quedan después de preparar un coloide.
Una atmósfera iónica muy fuerte tiene un efecto deletéreo
sobre el potencial zeta de las partículas
que lo forman, por lo cual el coloide pierde estabilidad. Esto se cubrirá
con más detalle cuando veamos propiedades
eléctricas de los coloides.
Sedimentación y centrifugación
Ya hemos visto que una partícula más densa que el medio que
la rodea tenderá a sedimentar por acción de la gravedad.
Desafortunadamente, las partículas coloidales tienden a alcanzar
equilibrio de sedimentación, gracias a la fuerza contraria de difusión
producida por el gradiente de potencial químico generado al sedimentarse.
Rara vez podemos depender de la fuerza de gravedad para sedimentar partículas
coloidales, por lo cual es necesario acelerar el proceso por medio de fuerza
centrífuga. A esto se le llama centrifugación. Mientras el
coloide sea liofílico, no hay mucho de qué preocuparse. En
el caso de los coloides liofóbicos de partícula muy pequeña
puede suceder que la fuerza centrífuga aplicada sea tan grande que
las partículas se agreguen en un solo grumo muy difícil de
redispersar. Hay que tener, pues, cuidado en utilizar una velocidad de
centrifugación adecuada que nos permita redispersar las partículas.
Aplicaciones: Determinación de pesos moleculares
de proteínas
La ultracentrífuga fue inventada por Svedberg en 1925 para ayudar
en la separación y purificación de proteínas. Para
determinar el peso molecular de las proteínas se emplean tres tipos
de mediciones:
-
Velocidad de sedimentación
-
Equilibrio de sedimentación
-
Aproximación al equilibrio
Velocidad de sedimentación
El método de velocidad de sedimentación se basa en tomar
fotografías de las partículas a varios intervalos de tiempo
durante la centrifugación. Con esto determinamos el coeficiente
de sedimentación. Mediante la ecuación de Svedberg se
puede calcular el peso molecular de una proteína a partir del coeficiente
de sedimentación.
Ecuación de Svedberg:
M = RTs/[D(1-v(ro))]
Hay que hacer notar que el coeficiente de sedimentación de una
macromolécula depende de varios factores:
-
La forma de la molécula depende del solvente
-
La carga de la macromolécula
-
La gran diferencia de tamaño con respecto al solvente
-
La molécula se deforma a medida que se mueve
estos factores resultan en la dependencia que el coeficiente de sedimentación
presenta con respecto a la concentración, velocidad de centrifugación
y fuerza iónica del disolvente. Por esto mismo, cuando se determinan
coeficientes de sedimentación, es necesario mantener la fuerza iónica
entre 0.05 y 1.00 para evitar los efectos de la carga y hay que regular
el pH con un regulador. Para descartar los efectos de la velocidad de sedimentación
hay que efectuar las mediciones a diferentes velocidades, que difieran
entre ellas aproximadamente 50%. A cada velocidad debe usarse un mínimo
de 4 concentraciones distintas.
Equilibrio de sedimentación
Este método posee dos ventajas importantes sobre el de velocidad
de sedimentación:
-
No precisa conocer el coeficiente de sedimentación
-
No precisa conocer la forma de la macromoléla
La ecuación utilizada es la siguiente:
M = [2RT ln(c2/c1]/[(omega)2(1-v(ro))(x22-x12)]
Aproximación al equilibrio
Este método es el menos exacto, pero permite una determinación
más rápida del peso molecular. La velocidad del rotor de
la ultracentrífuga se lleva a la de equilibrio en un periodo de
una o dos horas mediante una serie de ajustes. Las medidas se llevan a
cabo en el fondo del tubo y luego se puede extrapolar el peso molecular.
Diálisis
La diálisis sirve para eliminar electrolitos en exceso. Los iones
se difunden a través de una membrana permeable a los iones pero
impermeable a las partículas coloidales. Algunos autores le llaman
membrana semipermeable, pero en este
curso restringiremos el término semipermeable para membranas osmóticas.
Las membranas de diálisis pueden hacerse con colodión
(nitrato de celulosa, celulosa regenerada). La diálisis puede verse
obstaculizada, al principio, debido al flujo osmótico del solvente,
pero a medida que la concentración de sales disminuye el problema
se alivia.
Puede acelerarse el flujo de los iones aplicando una diferencia de potencial
eléctrico, entonces la técnica se denomina electrodiálisis.
En algunos casos, también se presenta electrodecantación,
que es la sedimentación de las partículas coloidales en condiciones
de electrodiálisis.
Filtración y ultrafiltración
Ya hemos visto que la filtración normal no sirve por debajo de cierto
tamaño de partícula. Sin embargo, es posible producir membranas
con tamaño de poro suficientemente pequeño como para separar
partículas coloidales (p. ej., Millipore). En estos casos es necesario
forzar el paso del líquido a través de la membrana aplicando
presión o succión. A esta técnica se le llama ultrafiltración.
La ultrafiltración se usa mucho en la producción de aguas
embotelladas. No debe confundirse con la ósmosis inversa: la ultrafiltración
no elimina sustancias disueltas, solamente partículas sólidas;
mientras que la ósmosis inversa deja pasar solamente al slovente
y sí elimina los iones disueltos.
Intercambio iónico
Gracias a que la mayoría de los coloides poseen superficies cargadas,
estas cargas son neutralizadas por adsorción de iones de la solución.
En ciertos casos lo que nos interesa es asegurarnos que los iones adsorbidos
sean todos de la misma clase. Esto se puede hacer por intercambio sobre
una resina de cambio iónico cargada con los iones que nos interesa
adsorber sobre el coloide. El mayor problema consiste en eliminar todos
los contaminantes que puedan estar presentes sobre las perlas de la resina,
lo cual no es tan fácil como pudiera parecer.
Adsorción competitiva
Fundamentalmente es el mismo procedimiento utilizado en los laboratorios
de química orgánica: adsorber impurezas sobre carbón
activado. Los químicos de coloides prefieren emplear tejidos de
fibras de carbono, en lugar de carbón en polvo, debido a que es
más fácil eliminar el carbono con las impurezas adsorbidas.
De nuevo, la tela requiere un tratamiento para eliminar todas las impurezas
con las cuales pudiera contaminar el coloide.
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Ultima actualización de esta página: 7 de agosto de 1998
Encargado de la página: Dr. Víctor Manuel Rosas García.
e-mail:vrosas@ccr.dsi.uanl.mx
Facultad de Ciencias Químicas
Universidad Autónoma de Nuevo León
San Nicolás de los Garza, NL, México.